¿Llega el verano y con las idas a la playa, las tardes de piscina y los días bajo el sol lo notas menos fuerte? La exposición continua a los rayos, así como al cloro o a la sal, produce daños en nuestro cabello que, sin un cuidado específico, pueden desencadenar la caída de este. Pero no te preocupes, la caída del pelo es un fenómeno natural que ocurre diariamente debido a su regeneración y al ciclo de vida del mismo.
La caída estacionaria del cabello forma parte del ciclo de crecimiento de mismo.
Durante la vida del pelo, su crecimiento pasa por tres fases diferenciadas: Anágena, catágena y telógena. Esta última es lo que conocemos como caída del cabello y no es nada más que la renovación de los propios folículos por otros nuevos que van naciendo. Este proceso es más visible en los cambios de estación, ya que, de manera natural, nuestro cabello se adapta a las condiciones meteorológicas. A lo mejor has oído hablar de lo conocido como otoño capilar: una muda de cabello estacionaria que nos prepara para aquellas temporadas con mayor frío.
Pero si mi pelo muda en primavera… ¿Por qué aumenta su caída durante el verano?
La influencia de factores externos puede acelerar la fase telógena del crecimiento
Al estar expuesto a más daños, o a un intenso estrés, las fibras capilares de debilitan con mayor facilidad, propiciando que el ciclo tenga que realizarse a un ritmo mayor. A veces, cuando la primavera ha sido especialmente cálida, esta caída se retrasa y puede extenderse incluso a períodos otoñales.
Nos obstante, si seguimos una rutina de cuidado, nuestro cabello lucirá bonito y fuerte como el primer día.
En verano es muy importante no descuidar la alimentación para cuidar el cabello
Entre los consejos de las clínicas IMD, el primer paso para el cuidado capilar en verano es no descuidar la alimentación y, principalmente, renegar de las dietas restrictivas: la falta de hierro, zinc, calcio y omega 3, entre otros nutrientes, sumado a la fricción y la deshidratación que produce la sal en nuestro cabello, o al daño químico del cloro, debilitará nuestro cuero cabelludo y hará más propensa la caída del cabello.
Una buena rutina de cuidado contribuye en la buena salud de nuestro cabello
Hay una serie de pequeños cambios diarios que podemos hacer para asegurarnos que nuestra salud capilar mejore e, incluso, evitemos la caída del cabello. Aprovechar las horas de sol y despedirnos del secador durante el verano es un gesto que evitará que tu pelo se deshidrate aún más.
- Escoger champús no agresivos, aumentar la frecuencia de lavado y optar por el agua fría, harán que no se pierdan los aceites naturales del cabello, lo que servirá de escudo para el daño ocasionado por fricción. Del mismo modo, si continuamente mantenemos en la agenda las visitas a la playa o a la piscina, es recomendable aclararse sólo con agua después del baño.
- Sanearse el pelo, optar por el uso de protectores térmicos y solares o el uso de sobreros y gorras, ayudará a que tu pelo se mantenga bonito minimizando los daños producidos por el sol y contribuyendo a que el ciclo de crecimiento de tu cabello puede suceder naturalmente.
- A su vez, evitar el recogerse el pelo muy apretado o el utilizar cepillos de púas anchas para desenredarlo, hará que no se produzcan tirones a la hora de estilizarlo.
- Si sufres de encrespamiento, productos como el aloe o el aguacate son maravillosos para mantener la salud de tu pelo. Si vas a exponerte al sol, evita el uso de aceites ya que estos pueden ser agresivos en contacto con los rayos UVA. A su vez, una buena mascarilla tras cada baño hará que tu pelo siga bonito, fuerte e hidratado.
- Si es posible prioriza el uso de gorro para evitar el contacto del agua con tu pelo.
Es importante recordar que una buena alimentación es el paso más importante para mantener el cabello sano.
Como ya hemos apuntado, a pesar de que hagamos un cuidado perfecto de nuestro cabello, descuidar nuestra alimentación acelerará su caída debido a la falta de vitaminas y minerales para su crecimiento. Por esto, si quieres que tu pelo luzca sano y fuerte, lo principal es que seas consciente de no desentender tu régimen alimenticio, comiendo la cantidad suficiente de frutas, verdura, legumbres y proteína.