Contribuye con estas compras solidarias a proyectos que nos benefician a todos.
Cosmética facial, corporal, maquillajes, protectores solares, perfumes, moda, gastronomía… Las compras solidarias son una manera muy sencilla de hacer que el mundo sea un poquito mejor. Y es algo sencillo que está en tus manos. ¿Cómo? A la hora de comprar nuestros productos de belleza favoritos podemos elegir entre una marca u otra. Entonces, estarás de acuerdo que es mejor apoyar aquellas empresas o marcas que llevan a cabo o apoyan proyectos solidarios en beneficio de todos. Al adquirir sus productos con tus compras solidarias, estás participando tú también a un mundo más justo.
Nuestro objetivo: un cambio positivo en el consumo
El objetivo de Belleza Solidaria es que conozcas el esfuerzo y frutos de estas iniciativas solidarias, muchas veces desconocidas o que no encuentran espacio suficiente en otros medios de comunicación. Son marcas que nos gustan porque, además de fabricar productos de calidad, desarrollan o apoyan proyectos hoy en días más necesarios que nunca. De ahí que te animemos a poner en práctica las compras solidarias para que estas marcas puedan seguir creciendo y ayudando.
Entre las iniciativas que destacamos en esta sección encontrarás proyectos que impulsan la educación. Otros ayudan a combatir la violencia de género. Muchos velan por los derechos de la infancia, las personas mayores y muchos proyectos que protegen la naturaleza.Todas diferentes, igualmente importantes.
¡Opta por las compras solidarias!
Dicho esto, te animamos a que pongas en práctica las compras solidarias. ¿Cómo? informándote de los proyectos que impulsan estas marcas y que las distinguen del resto. En algunos casos puede que estés pagando un poco más en apoyo a los proyectos que sin tu ayuda no sería posible realizar. ¿Te animas? A partir de ahora, elige belleza solidaria, es decir cosméticos, maquillajes, protectores solares, perfumes, moda… todo aquello que te guste pero que provenga de una empresa solidaria.
Muy importante: en Belleza Solidaria nos hacemos eco de estas marcas, de sus iniciativas y productos. Sin embargo no podemos hacernos responsables de la veracidad de sus acciones. La ética es de cada uno.