Todos somos conscientes de que algo está cambiando en nuestro mundo. La crisis del coronavirus ha afectado a todos los ámbitos: social, económico, educativo, sanitario… Incluso ha salpicado al sector de la belleza. Stanpa (Asociación Española de Perfumería y Cosmética) nos contaba tras el confinamiento que seguimos comprando fragancias, maquillaje y cremas, pero lo hacemos de un modo diferente. El consumidor de belleza es ahora CSS: consciente, solidario y sostenible. Nos importa más que nunca comprar a marcas o establecimientos que respeten y cumplan esos nuevos valores. Por eso queremos hablarte hoy de las Perfumerías Douglas.
Seguro que conoces sus perfumerías. La cadena alemana de tiendas de cosmética y perfumería cuenta con más de 300 establecimientos en nuestras calles. Sin embargo mucho ha cambiado desde que Douglas desembarcó en España en 1995. Sus espacios se han ido adaptando a cómo la sociedad entiende la belleza. Por esa razón, desde hace un par de años, conceptos como Clean Beauty, el sé tú mismo o lo ecofriendly se han colado en sus tiendas.
De hecho, Douglas está a punto de inaugurar la primera flagship store en nuestro país, en Madrid. Un espacio único de dos plantas en plena Gran Vía -y con todas las medidas de seguridad- donde disfrutar de ese nuevo concepto de belleza que nos gusta. Contará con todo tipo de Beauty Servies, desde Makeup Atelier, cabinas para tratamientos, zona de hair styling de la mano de Dyson… Así como personal especializado para asesorar a los clientes en perfumes y fragancias nicho. Si quieres asistir a la inauguración, entre el jueves 10 y domingo 13 de septiembre, puedes adquirir gratis tus entradas de forma online y disfrutar de esta experiencia beauty.
Remontándonos al siglo XIX
Empecemos con un poco de historia. Los orígenes de Douglas se remontan al año 1821, cuando un inmigrante escocés, John Sharp Douglas, abrió una fábrica de jabón en Hamburgo. En aquel momento, sus productos ya se situaban a la vanguardia. El jabón Chinese Heavenly (1840), por ejemplo, recibió una medalla en la primera Feria Mundial de Londres, en 1851. Tras la muerte del fundador, unos comerciantes germanos (y sobre todo, la mujer de uno de ellos) se pusieron al frente. Hasta que en el año 1910 otras dos mujeres, las hermanas Anna y Maria Carstens abrieron la primera Perfumería Douglas, en Hamburgo.
Después llegarían otras cinco. Así hasta que, tras pasar por varias manos, a finales de los 70 empieza su expansión internacional, que le ha llevado a estar presente en casi toda Europa con más de 2.400 establecimientos. Y convertirse en el “destino número 1 de la belleza” en nuestro continente. Otro hito lo marca el año 2017, cuando Tina Müller se convierte en CEO de Douglas y la estrategia #Forwardbeauty (hacia la belleza) empieza a marcar el nuevo rumbo del grupo. Desde entonces se dirige hacia una belleza real, auténtica, experiencial y respetuosa.
Clean beauty y otros grandes valores
Uno de los puntos fuertes de Douglas es haberse alzado como abanderado de las marcas Clean Beauty. De hecho, muchas de las firmas que se venden en sus locales se enmarcan en este concepto de belleza que cada día gana más adeptos. Florence by Mills, Kylie Skin, Alma K o One Two Free son algunas de las que puedes encontrar en exclusiva en sus estanterías. Junto a ellas hay otras también interesantes como Dafna’s Skincare, Honest Beauty o Kora Organics.
Todos los productos marcados con el sello Clean Beauty combinan tres aspectos esenciales:
- Sus fórmulas están libres de ingredientes polémicos: siliconas cíclicas, parabenos, sulfatos agresivos, fragancias sintéticas o aceites minerales…
- Son cruelty free, es decir, está garantizado que no han practicado experimentos en animales
- Tienen resultados eficaces. Porque lo respetuoso con la piel, la sociedad o el medio ambiente no está reñido con la eficacia.
Si, de todos modos, te encuentras perdida en este mundillo, siempre puedes consultar con los consejeros de Douglas. El grupo cuenta con más de 20.000 que resuelven dudas tanto en sus tiendas como de forma online y te guiarán entre los más de 55.000 productos de las casi 800 marcas que puedes encontrar allí.
Un compromiso a gran escala
Aunque Douglas siempre había apostado por un rumbo empresarial sostenible, desde que se puso en marcha el lema #Forwardbeauty, a la responsabilidad corporativa se le suma la social y medioambiental. Como líder en la industria europea de la belleza, el grupo comparte una postura comprometida al respecto: la verdadera belleza brilla desde adentro. Sus campañas, como la protagonizada por Cara Delevingne, que defienden la confianza y seguridad personal, alientan a cada uno a ser como quiera y vivir su propia belleza.
Además, colabora con diversas entidades, como DKMS Life, con quien imparte talleres de cosmética gratuitos a mujeres con cáncer. Más recientemente, en España, ha apoyado la labor de Cruz Roja durante los peores momentos de la crisis del coronavirus. Como otros actores solidarios del mundo beauty, Douglas apoyó a la organización, ofreciendo a sus clientes donar un euro en las compras online.
El grupo también está involucrado en la igualdad de oportunidades para hombres y mujeres. Como miembro de «Iniciativa Mujeres en el Liderazgo» promueven el desarrollo de carrera femenino e impulsan su rol dentro de la compañía.
Y por supuesto, el grupo no ha dejado de lado el compromiso medioambiental, pilar fundamental en el mundo de la belleza y la cosmética. En las tiendas se cuida la eficiencia energética, y su sede, en Dussëldorf cumple con todos los estándares ecológicos.
Está claro que, pese a los cambios que nos están tocando vivir, seguiremos invirtiendo en cosmética y en belleza. Porque nos gusta vernos bien. Nos lo merecemos o, simplemente, nos apetece. Pero, como llevamos años haciendo post tras post, desde Belleza Solidaria te animamos a que apuestes por marcas y tiendas que escondan historias como esta.