18/07/2022
¿Llega el verano y con las idas a la playa, las tardes de piscina y los días bajo el sol lo notas menos fuerte? La exposición continua a los rayos, así como al cloro o a la sal, produce daños en nuestro cabello que, sin un cuidado específico, pueden desencadenar la caída de este. Pero no te preocupes, la caída del pelo es un fenómeno natural que ocurre diariamente debido a su regeneración y al ciclo de vida del mismo.
Durante la vida del pelo, su crecimiento pasa por tres fases diferenciadas: Anágena, catágena y telógena. Esta última es lo que conocemos como caída del cabello y no es nada más que la renovación de los propios folículos por otros nuevos que van naciendo. Este proceso es más visible en los cambios de estación, ya que, de manera natural, nuestro cabello se adapta a las condiciones meteorológicas. A lo mejor has oído hablar de lo conocido como otoño capilar: una muda de cabello estacionaria que nos prepara para aquellas temporadas con mayor frío.
Pero si mi pelo muda en primavera… ¿Por qué aumenta su caída durante el verano?
Al estar expuesto a más daños, o a un intenso estrés, las fibras capilares de debilitan con mayor facilidad, propiciando que el ciclo tenga que realizarse a un ritmo mayor. A veces, cuando la primavera ha sido especialmente cálida, esta caída se retrasa y puede extenderse incluso a períodos otoñales.
Nos obstante, si seguimos una rutina de cuidado, nuestro cabello lucirá bonito y fuerte como el primer día.
Entre los consejos de las clínicas IMD, el primer paso para el cuidado capilar en verano es no descuidar la alimentación y, principalmente, renegar de las dietas restrictivas: la falta de hierro, zinc, calcio y omega 3, entre otros nutrientes, sumado a la fricción y la deshidratación que produce la sal en nuestro cabello, o al daño químico del cloro, debilitará nuestro cuero cabelludo y hará más propensa la caída del cabello.
Hay una serie de pequeños cambios diarios que podemos hacer para asegurarnos que nuestra salud capilar mejore e, incluso, evitemos la caída del cabello. Aprovechar las horas de sol y despedirnos del secador durante el verano es un gesto que evitará que tu pelo se deshidrate aún más.
Como ya hemos apuntado, a pesar de que hagamos un cuidado perfecto de nuestro cabello, descuidar nuestra alimentación acelerará su caída debido a la falta de vitaminas y minerales para su crecimiento. Por esto, si quieres que tu pelo luzca sano y fuerte, lo principal es que seas consciente de no desentender tu régimen alimenticio, comiendo la cantidad suficiente de frutas, verdura, legumbres y proteína.