07/03/2025
No lo llames amor porque si hay abuso no lo es. La violencia en la pareja es la forma más común de violencia contra las mujeres. Y ojo al dato que nos da YSL: afecta a unos 736 millones de mujeres y niñas en todo el mundo. Sigue siendo demasiado habitual que el comportamiento abusivo se justifique erróneamente como amor. Y no deja de ser chocante que una de cada tres mujeres sufra violencia en la pareja a lo largo de su vida. El abuso no tiene edad pero siguen siendo las jóvenes las que presentan un mayor riesgo.
Desde el lanzamiento de su programa “El Abuso no es Amor “en 2020, YSL Beauty se ha dedicado a cambiar esta realidad. Y lo ha hecho donando 5,2 millones de euros a ONG locales asociadas y más de 1,3 millones de personas formadas o apoyadas.
El Abuso no es Amor ha logrado importantes avances en la educación de los jóvenes sobre este tema a nivel global. En el caso de España este programa ha ayudado a más de 37.000 personas desde su inicio en 2021. Y lo ha hecho en colaboración con la Fundación Anabella. Para ver la importancia de esta acción solo hay que resaltar algunos datos. Como por ejemplo que, gracias a estas formaciones han aparecido más de 2.000 jóvenes que han roto su silencio sobre su experiencia de abuso. Y más de 600 han solicitado ayuda ante una situación de riesgo que, en muchos casos, se ha derivado a las autoridades policiales. Estas 600 personas han tenido una atención y un protocolo de intervención para ayudarles a salir y a denunciar su situación.
“No lo llames amor”, es una nueva campaña mundial que invita a la reflexión. Se desarrolla en el marco de su programa El Abuso no es Amor y con esta nueva acción YSL pone luz a la oscuridad. A través de la deconstrucción de la imagen romántica de las relaciones tóxicas, No lo llames amor pretende suscitar conversaciones cruciales, romper el ciclo del abuso e inspirar un cambio estructural dentro de la industria de la belleza y fuera de ella. Es una llamada a un enfoque más consciente, responsable e impactante de la narración.
Y lo hace con un film que visibiliza este problema. En esta campaña, YSL Beauty retrata un romance parisino aparentemente idílico en el que las señales de advertencia de los malos tratos se ocultan a plena vista, para educar sobre la violencia en la pareja. Con este lanzamiento, la marca invita a una reflexión colectiva sobre cómo puede contribuir a unas representaciones más sanas del amor y a crear narrativas que no perpetúen las normas tóxicas de las relaciones.
La campaña, que describe un idílico y elegante romance parisino, se desarrolla a través de una serie de escenas bellamente elaboradas: una fiesta glamurosa, un paseo romántico, momentos íntimos. Ella es una joven hermosa, segura de sí misma y cautivadora. Y él, un joven apuesto, que desprende un encanto oscuro y misterioso. La impresión inicial es la de una pareja magnética y elegante. Pero a medida que avanza la historia, empieza a surgir un sutil malestar. Casi imperceptiblemente, surgen señales de advertencia de abuso, entretejidas en el escenario de estas escenas aparentemente románticas. El espectador se siente atraído por la narración, cautivado en un principio por el romance, y luego sutilmente perturbado por una creciente sensación de inquietud.
El film se detiene bruscamente, planteando un poderoso mensaje: «¿Has visto señales de abuso en este vídeo?». A continuación, la narración se rebobina, dejando al descubierto los signos de maltrato de cada escena, ocultos a plena vista. La campaña nos educa activamente para que miremos más de cerca los comportamientos considerados normales en nuestras relaciones, pero que pueden ser precursores de la violencia física, sexual o emocional. A continuación, la película ofrece recursos y anima a los espectadores a informarse y buscar apoyo si lo necesitan.
EL ABUSO ES ABUSO, ya sea físico, sexual, psicológico o financiero. Y los malos tratos pueden venir acompañados de señales de advertencia. Desde la intrusión, los celos, el aislamiento hasta incluso el chantaje y la intimidación, existen nueve categorías clave de señales de alarma y, si todo el mundo es consciente de ellas, es posible actuar y detenerlas.
Paralelamente a sus asociaciones con ONGS, El Abuso no es Amor lleva a cabo campañas de concienciación a gran escala centradas en sensibilizar y ayudar a identificar las principales señales de alarma asociadas a la violencia en la pareja. Para ayudar a todos a reconocer este problema social antes de que se incremente, YSL Beauty utiliza su voz para desestigmatizar el tema y para dar a los supervivientes el lenguaje necesario para hablar de su experiencia. Al difundir esta información en lugares públicos, el programa El Abuso no es Amor se asegura de que esta información y concienciación de las señales de advertencia esté disponible para las personas que necesiten pedir ayuda o para ofrecérsela.
En el caso de España es la Fundación Anabella quien lleva a cabo un programa dedicado a proporcionar a los jóvenes los recursos y el apoyo que necesitan para tener una relación sana. A través de este programa se crea un espacio más seguro para ayudar a las jóvenes generaciones a conseguir relaciones satisfactorias, sanas y libres de abuso.