Pocas son las personas que a lo largo de su vida no tienen que aprender a convivir con las estrías. En los muslos, la tripa, los brazos, las axilas o el pecho, estas marcas son uno de los problemas estéticos más comunes. De hecho, son varios los estudios médicos que apuntan a que el 90% de las mujeres las padecen (en hombres, el dato se reduce, aproximadamente a la mitad). A muchos les aparecen durante la adolescencia. Como explican desde la Academia Española de Dermatología (AEDV), «son frecuentes en ellos debido al estrechamiento físico de la piel al crecer o, también pueden ser provocadas por tratamientos con corticoides, que pueden provocar atrofia cutánea». Los cambios bruscos de peso que podemos experimentar a lo largo de nuestra vida o el embarazo son otros de los momentos críticos para la aparición de estrías.
Pero, ¿en qué consisten estas marcas cutáneas? Al fin y al cabo, las estrías son pequeñas cicatrices de la piel que aparecen por el impacto en la piel de todos los procesos mencionados (desarrollo, embarazo, cambio de peso…), que implican que se estire y se adapte a su nueva extensión rápidamente. Si las estructuras están en correcto estado, no hay problema. Pero si la estructura de las fibras se debilita, pueden aparecer esas líneas que, primero son rojas y después, al cicatrizar, se vuelven blancas.
Mejor prevenir…
Durante mucho tiempo hemos dado por sentado que es imposible deshacerse de las estrías. Y, lo cierto, es que junto con la celulitis es uno de los caballos de batalla de la cosmética. Marcas como Elancyl no dejan de investigar para dar con la clave de su desaparición. El problema, como destaca María Vitale, Medical Manager Dermatology de Cantabria Labs, al que pertenece Elancyl, es que «las estrías blancas solo pueden mejorarse mientras que las rojas pueden llegar a desaparecer. Si entendemos que es un proceso evolutivo, cuanto antes intervengamos y utilicemos productos bien tolerados, tendremos mayor posibilidad de éxito terapéutico».
En otras palabras, la prevención es la herramienta antiestrías más eficaz. Lo ideal es aplicar fórmulas que ayuden a reforzar la superficie y elasticidad de la piel, para que ésta sea capaz de resistir a la tensión de estiramiento. Además, así se puede promover la síntesis de colágeno y elastina, responsables de darle elasticidad y firmeza.
Un ataque en dos etapas
Elancyl ha querido ir un paso más allá. Para ello ha lanzado un dúo de productos corporales que las trata en dos fases. Hasta ahora, el enfoque se centraba, sobre todo, en conseguir mayor elasticidad, hidratación y nutrición con el fin de prevenir y, no tanto, de corregir el aspecto de la estría. Por primera vez, Cantabria Labs, laboratorio al que pertenece Elancyl, ha conseguido dos fórmulas con eficacia demostrada en el tratamiento de las estrías.
Por un lado, encontramos Elancyl Crema de Prevención (25,93 euros). Un cuidado hidratante diario que reduce la aparición de nuevas estrías. Contiene aceites de cártamo, almendras dulces y pantenol para una acción fortalecedora de la superficie cutánea; hidroxiprolina y silicio orgánico para estimular la producción de proteínas estructurales. Resulta idóneo para aplicar durante el embarazo así como ante cambios de peso y hormonales. Por otro, Elancyl Gel-crema Corrección Intensiva (34,61 euros). Una fórmula de acción intensiva sobre las estrías recién formadas (las rojas) que ha demostrado reducir significativamente su color o tamaño.
¿El secreto? Combina un 15% de ácido glicólico que promueve el proceso de renovación epidérmica y suaviza la textura con activos regeneradores como el bakuchiol y la hidroxoprolina que estimulan la síntesis de colágeno y elastina. También cuenta con pantenol y ácido hialurónico para calmar y proteger la piel. Eso sí, se debe usar tras el parto y/o la lactancia. También es idóneo como complemento tópico a tratamientos estéticos para las estrías (carboxiterapia, láser, peelings…). Ambos tratamientos cuentan con el respaldo científico de Cantabria Labs, aunque, por supuesto, y como insistieron en su presentación, la constancia, una alimentación saludable y algo de ejercicio son fundamentales para conseguir los resultados deseados.