Parece que fue ayer pero la línea cosmética MAC lleva ya 25 años colaborando con la lucha contra el SIDA a través de su pintalabios más icónico: el Viva Glam.
Su lucha empezó cuando la enfermedad alcanzó sus cotas máximas (en 1994) y desde entonces ha recaudado más de 500 millones de dólares que han mejorado la vida de alrededor de 19 millones de personas.
Nunca el rojo pasión de una barra de labios había hecho tanto por cambiar el mundo y ahora la lucha continúa ampliando su apoyo también a niñas, mujeres y el colectivo LGBTQ.
Ahora tenemos pruebas y tratamientos necesarios para acabar con el SIDA; ahora tenemos que enfrentarnos a las desigualdades y el estigma que impide que las mujeres, las niñas y la comunidad LGBTQ busquen y sigan recibiendo tratamiento. En 2019, MAC ampliará esa visión al desarrollar dicha misión para reflejar el enfoque interseccional y la confluencia necesaria para terminar con la epidemia».
Nancy Mahon, Directora Global Ejecutiva del Fondo MAC Viva Glam.
Winnie Harlow, imagenViva Glam de MAC 2019
Este año la imagen de la noble causa de MAC será la modelo Winnie Harlow, que recrea el estilismo que utilizó la icónica Drag Queen RuPaul en 1994, cuando se convirtió en la primera imagen de la línea Viva Glam.
«Me inspiré para recrear la campaña original de VIVA GLAM después de que mi peluquero, Jay Brumant, me mostrase las fantásticas imágenes de la misma. Trabajando en moda, estoy rodeada de muchos tipos de belleza y creo que las contribuciones de la comunidad LGBTQ + son tanto notables como respaldadas en el mundo de la moda«, ha confirmado Winnie Harlow que ha confesado que siempre había querido representar un «drag moment».
«¡Sabía que si alguna vez lo intentaba, tendría que adoptar un look ICÓNICO! ¿Quién es más icónico que RuPaul en la campaña MAC Viva Glam?«, comenta Harlow.
La atrevida modelo, desde luego, no decepciona en su puesta en escena. Y, obviamente, la nueva imagen del ya mítico lipstick tampoco lo hace.
En su 25 aniversario se pone sus mejores galas y brillos para recordarnos el recorrido de un proyecto que debe seguir dando pasos con la ayuda de todos. Para hacerlo, la ayuda que se nos pide es pequeña: comprar el lipstick para presumir de labios de infarto y conscientes de que hasta el último céntimo que invirtamos irá destinado a la noble causa. ¿Te sumas?